domingo, 20 de diciembre de 2009

(..)


Este es el único medio por el cual puedo desahogarme, escribir todo lo que por mi mente pasa, sin temores. No sé como los días pasan sin tener sentido alguno, aunque el sentido debería dárselo yo, el sentido sería mi bienestar. Un bienestar que día a día debería ir encontrando, ese bienestar que le de un remezón a mi alma.
Me cuesta escribir sin lamentarse, sin arrepentirse, sin llorar, sin pensar, sin suspirar.
Ese ciclo llamado amor, en algún momento debe terminar, para comenzar otros, el mío ya acabo, y los procesos comienzan, el duelo se vive, se llora, se grita, para luego de días, semanas, meces tal ves, darle paso a eso que se llama olvido. A eso que a uno no le enseñan, a eso que se debe vivir solo. Me cuesta fingir, y me cuesta no llorar, cada uno tiene una forma de ser, una manera de expresarse, una manera de amar, y una de olvidar. Pero a mí el olvido me toma tiempo. De esos tiempos que se hacen infinitos, como pensé que el amor sería para mí.
Estando contigo lo dí todo, todo lo que podía existir en mí corazón lo entregue. Ame como nunca pude amar, protegí como jamás pensé que lo haría, pero creo que no cuide lo suficiente, ni me esforcé lo suficiente para sacar adelante esto.
Cuesta mucho no pensar en ti, en lo que fuimos, y en lo que ya no esta. En lo que alguna vez causo felicidad plena y hoy causa el dolor más grande para mi alma.
Extraño el sabor de tantas cosas, extraño ese amor, extraño las sonrisas, las ganas, los abrazos, tu compañía.
Fuiste lo mejor que pude tener en mi vida, lo más maravilloso, y lo que quería tener por mucho tiempo más. Ahora que estoy sin ti, mis temores salen a flote, y mis ganas de ir corriendo a pedirte una oportunidad, abundan mi mente día a día. Ya no tengo a quién darle esa preocupación, esa atención, ese amor, esas caricias.. Y costará mucho poder dárselas a otra persona. Siempre supe que cuando tú faltaras, nada sería igual.
Día a día me iré desprendiendo de todo lo que me acuerda a ti, sé que lo conseguiré, nunca nada es imposible, aunque uno piense que nunca llegará aquel día.
Quiero estar bien, contigo o sin ti. Y sin ti es la opción más apropiada, ahora que me alejaste de todo lo que eras tú.
Cueste lo que cueste, me prometo a mi misma, que estaré bien sin ti.

No hay comentarios:

Publicar un comentario