A.

Hoy duele mucho menos, tal ves menos que ayer, o más de lo que dolerá mañana.
Pero hoy es hoy, y de eso debo preocuparme yo. Ayer pensé mucho, más de lo que en días no había pensando, y mis conclusiones no fueron las mejores, pero las que debían ser. Hoy te vi muy temprano, y en tus ojos podía notar esa felicidad que te hacia venir a mí, te conocí en septiembre y desde ese mes no pare nunca más de verte, ahora que te vas junto a la persona que amas, y a donde esta toda tú familia que te quiere, me hace completamente feliz por que sé que estarás bien, no niego que me da tristeza el hecho de que te vallas, ya que a pesar de que siempre estabas ocupada, ves que podías me regalabas tu tiempo, me cosinabas, nos leíamos las cartas, veíamos peliculas, llorabamos, pintabamos.. Muchas gracias por el desayuno de hoy, por sacarnos sonrisas mutuamente, por tú regalo, por tú carta, por la despedida.
Quiero que seas muy feliz allá, que todo resulte como quieres, y que sigas creando sueños. Gracias por hacerme la mañana más encantadora, más acogedora.
Siempre me acordaré de todas tus palabras reconfortantes, de tus abrazos, y de esos ojitos.
Te echaré mucho de menos, te quiero un montón..

Carita de gato

Te conozco desde hace tanto, y eh vivido un sin fin de cosas contigo. Estos días hemos conversado mucho, hemos llorado mucho y mutuamente nos hemos dado la fuerza necesaria para estabilizarnos un poco. Haz sido tú quien me a sostenido en sus brazos cuando sentía que perdía la calma, y fui yo quien te dio el empujón para ir casi corriendo donde ella. Ayer fue el momento más bonito que desde hace mucho tiempo no tenía contigo, verte llorar con esas infinitas ganas me hicieron entenderte mejor, me hicieron abrasarte y susurrarte al oído que no estas sola.
‘’ No la dejes sola, búscala, ella te necesita como tú a ella, sí es lo que verdaderamente amas, no dejes que otra persona le de todo lo que tú solías darle, yo sé que ella te ama, te ama mucho y a su manera, esa manera loca tal ves, arrebatada, esa manera que tal ves a veces te daña, sé que la necesitas, por lo mismo ahora lavate la carita, llamala y ve dónde ella ‘’.
Yo te quiero mucho, y espero que tengas la fuerza suficiente para volver a estar bien.
No te dejaré nunca sola, carita de gato arriba el ánimo.

(..)

Este es el único medio por el cual puedo desahogarme, escribir todo lo que por mi mente pasa, sin temores. No sé como los días pasan sin tener sentido alguno, aunque el sentido debería dárselo yo, el sentido sería mi bienestar. Un bienestar que día a día debería ir encontrando, ese bienestar que le de un remezón a mi alma.
Me cuesta escribir sin lamentarse, sin arrepentirse, sin llorar, sin pensar, sin suspirar.
Ese ciclo llamado amor, en algún momento debe terminar, para comenzar otros, el mío ya acabo, y los procesos comienzan, el duelo se vive, se llora, se grita, para luego de días, semanas, meces tal ves, darle paso a eso que se llama olvido. A eso que a uno no le enseñan, a eso que se debe vivir solo. Me cuesta fingir, y me cuesta no llorar, cada uno tiene una forma de ser, una manera de expresarse, una manera de amar, y una de olvidar. Pero a mí el olvido me toma tiempo. De esos tiempos que se hacen infinitos, como pensé que el amor sería para mí.
Estando contigo lo dí todo, todo lo que podía existir en mí corazón lo entregue. Ame como nunca pude amar, protegí como jamás pensé que lo haría, pero creo que no cuide lo suficiente, ni me esforcé lo suficiente para sacar adelante esto.
Cuesta mucho no pensar en ti, en lo que fuimos, y en lo que ya no esta. En lo que alguna vez causo felicidad plena y hoy causa el dolor más grande para mi alma.
Extraño el sabor de tantas cosas, extraño ese amor, extraño las sonrisas, las ganas, los abrazos, tu compañía.
Fuiste lo mejor que pude tener en mi vida, lo más maravilloso, y lo que quería tener por mucho tiempo más. Ahora que estoy sin ti, mis temores salen a flote, y mis ganas de ir corriendo a pedirte una oportunidad, abundan mi mente día a día. Ya no tengo a quién darle esa preocupación, esa atención, ese amor, esas caricias.. Y costará mucho poder dárselas a otra persona. Siempre supe que cuando tú faltaras, nada sería igual.
Día a día me iré desprendiendo de todo lo que me acuerda a ti, sé que lo conseguiré, nunca nada es imposible, aunque uno piense que nunca llegará aquel día.
Quiero estar bien, contigo o sin ti. Y sin ti es la opción más apropiada, ahora que me alejaste de todo lo que eras tú.
Cueste lo que cueste, me prometo a mi misma, que estaré bien sin ti.